
La Belleza con mayúscula de un lugar estriba, entre otras cualidades, pero principalmente, en la energía que transmita, la magia que irradie y se pueda palpar, en la historia e historias que encierre, la sutil belleza que destilen sus recovecos y en el caso de lugares musicales cara al público, de la gente que la habite y de la calidad de los artistas…. En TODO esto, nuestro querido Libertad 8, destaca con holgura sobre cualquier otro lugar de encuentro musical.
El llamado mil veces “Templo de la canción de autor” no defrauda nunca, y a pesar de los empujones encomiables de lugares más jóvenes que se están abriendo paso, la sensación indescriptible de emoción al entrar por esas puertas que tantos maravillosos momentos, no sólo musicales, nos ha regalado en “libertad” a miles de amigos que hemos disfrutado de ellas, nos vale para saber valorar en su justa medida, que nos encontramos en un rincón que es historia viva de la música en España…
Por eso, el honor tan reconfortante e inesperado que Julián, hombre que destila sabiduría e historia musical, me brindó al poder tocar aquí, que es parecido al regalo que significa para todos nosotros poder subir a un escenario que ya forma parte de los libros de historia musical, no tiene precio… Mi humilde contribución durante muchos años, aparte de mi amistad sincera con toda la gente del Libertad: Justo, Jimena, Jesús, Ricardo, Dani, Lorenz, María, Julián y tantos otros… ha sido la de acompañar al piano con mayor o menor fortuna y compartir escenario con amigos y compañeros que han desfilado en esta tarima tan especial y que me han ayudado y enriquecido (estoy también más que agradecido a todos ellos) a crecer como músico y como persona: Tontxu, Ismael Serrano, Fran Fernández, Manuel Cuesta, Rash, Bel, Marwan, Pez Mago, Emiliano del Río, Migueli, Chaouen, Rafa Mora, Moncho Otero, Rodolfo Serrano, Joel Reyes, Juan Antonio Muriel, Miguel Dantart, Pedro Guerra, María Rozalén, Paco Cifuentes, Andrés Suárez…. Y un montón más, sólo me emocionan y me hacen sentir muy afortunado… Forman parte de mi propia vida.
Así pues, el hecho de tocar el sábado 20 de Junio, yo como artista, sin intenciones de suplantar a verdaderos genios, sino sólo como complemento a mi carrera musical y dando una parte de alimento a mi ego dicho sea de paso, es un hito único y emocionante para mí que me hace sentir orgulloso de la buena gente que me ha acompañado y que ha permitido que os intente mostrar lo que hago y lo que pueda quedar de bueno en mí. Os invito de corazón a participar no sólo en mi “concierto-espectáculo-raro”, sino en todos los proyectos maravillosos de música, teatro, pintura y artes que se siguen cocinando con inteligencia y mucho esfuerzo en este lugar mítico que generará mil sentimientos en todos y cada uno de los privilegiados que tengamos la oportunidad de estar presentes sintiéndonos parte viva de un pedazo de historia.
Gracias a todos… y salud!!! Que corra la música y el vino, y que las almas se templen y salga lo bueno y lo malo quede fuera, que siempre el Ser Humano es más feliz en “Libertad”….¡¡¡Ea!!! ¡¡¡ con Dios!!!!