
“El nido es un escondite de la vida alada” G. Bachelard En 2001 vine a Madrid desde muy lejos, como las aves migratorias. Y durante aquellos años que fueron muchos, fantaseaba con volver a la otra orilla preguntándome entonces, qué sería lo que más echaría de menos de esta ciudad además de los afectos.Continuar leyendo